El último Eurobarómetro sobre la relación entre juventud y drogas, revela que, aunque siguen siendo mayoría los europeos de entre 15 y 24 años que se oponen a legalizar el cannabis, el porcentaje que pide su regulación ha pasado del 34% al 45% en los tres últimos años. En el estado español, la variación es incluso superior: del 35% de 2011 al 47% actual.
El barómetro encargado por la Comisión Europea muestra, por otra parte, el rechazo persistente de los jóvenes (por encima del 90%) a la legalización de drogas como la heroína, la cocaína o el éxtasis.
Podríamos decir que la regulación del cannabis parece estar cada día más cerca. La “discusión abierta” en la sociedad europea, el hecho de que la juventud percibe netamente las diferencias entre el consumo de cannabis y el de drogas más duras, la legalización de cannabis para uso recreativo en los Estados de Washington y Colorado a finales de 2012 y que a principios de año, Uruguay aprobara la venta de esta sustancia en farmacias, hacen que esta posibilidad sea cada día más probable.
En el estado español la presión aumenta sostenida por los aproximadamente cuatro millones de personas (un 10% de la población entre 15 y 64 años) que declaran año tras año que consumen cannabis (un 7,6% fuma cada mes, según datos del Ministerio de Sanidad).
Según los últimos datos sobre consumo por comunidades autónomas, Baleares, la Comunidad Valenciana y Cataluña son, junto a Madrid y La Rioja, las Comunidades donde más se consume. Sin embargo, entre los más jóvenes (de 14 a 18 años) es Euskadi el que lidera el ránking (22,8%) junto a Aragón (21,7%).
La estadística señala también, que los hombres fuman más cannabis que las mujeres y las diferencias entre ambos sexos se acentúan con la edad.